Reapareciendo por aquí, filosofando un poco, a las 10 de la noche, sin tener mas nada que hacer ... quisiera decir supuestamente pero no puedo.. UNA FRASE me ha asentado perfectamente, hasta poco despues de las nueve, cuando decido acomodar una serie de lios superficiales y materiales que se arrinconaban en mi nuevo apartamento, al que le hace falta un poquito de calor humano.
Ya es costumbre dejar pasar momentos importantes, ver de lejos desde un punto de vista más que aéreo, los pormenores de lo que queda de mi infancia y mis raíces. Supongo que al elegir la vereda, que a veces me lleva a camino real, sacrifiqué con ésto, momentos de felicidad.
Hay sucesos que al pasar, me hacen dar gracias al destino mi posición en el camino, otros sólo ven rozar algunas lágrimas que se entremezclan con el sudor de mis mejillas.
La lejanía a una realidad que idealizo desde mis cuatro paredes nostálgicas, me hacen soñar con viajes imaginarios, mientras me devuelven a la vida, los ojitos juguetones del que despierta contento porque mami no lo obligó a levantarse de unas sábanas tibias, con sueño.
Va contento porque hoy es un día diferente, de esos que espera con ansias, mientras yo me enredo entre letras confusas y finalmente decido ducharme y salir a la calle.
Pudiera pasarme la tarde en un starbucks, pero creo que un cine será mas reconfortable...
jaja sin mas excusas de dias rojos, pero dejando a un lado el sentimentalismo, agradezco a mi fiel amigo, el loco al que le gusta bailar y cantar en su habitación desnudo, al increible terco por excelencia, él... que esta convencido que existen soluciones hasta para el problema mas graciosamente dificil poder resolver: “¡Si muero joven dile a la gente que yo fui una persona que intente que todo el mundo fuese feliz; el mundo es una pradera libre, corre sobre él, pero corre feliz porque el caso es que nada de eso valió la pena… Ahora salgo canto, bailo, y no lo hago con sarcasmo, lo hago porque soy feliz.” Esa fue la frase que me ha sentado bien esta tarde. Ha sido muy profunda ... ¡Gracias Julito, te quiero arto!
¡Esta vez, sonreire!
